Esta tarta es de textura muy suave, y apta para las personas celíacas ya que no lleva gluten. Tiene una textura parecida a una tarta de queso y sorprende tanto por su suavidad como la sencillez de la receta.
La puedes preparar sin ningún problema con muy pocos ingredientes y sin utilizar ni máquinas amasadoras ni otros artilugios complicados.
Allá vamos.
Ingredientes:
3 huevos tamaño L
3 yogurts tipo griego sin edulcorantes
120 gr. de azúcar
50 gr. de harina de maíz (Maicena)
Jugo de 1/2 limón
Para decorar con glasa de lima o limón:
Azúcar glas y unas gotas de jugo de limón.
Elaboración:
Separamos las claras de las yemas.
Batimos las claras a punto de nieve y reservamos.
Batimos bien las yemas de los huevos con el azúcar, seguidamente añadimos el resto de elementos , empezando por los yogures, cuando estén integrados añadimos el jugo de 1/2 limón y por último la Maicena, hasta conseguir una mezcla bien homogénea.
En ese momento añadimos las claras batidas a punto de nieve, mezclando con cuidado .
Preparamos el molde a utilizar, un molde redondo de aluminio de 15 cm. al que habremos forrado con papel de hornear, tanto en el fondo como los laterales, para facilitar su desmoldeado. Precalentamos el horno a 180º calor arriba y abajo, sin ventillador.
Cuando el horno haya alcanzado la temperatura especificada, introduciremos la mezcla en el molde, le damos un par de golpes contra la mesa (para evitar burbujas en la mezcla) y ponemos a hornear aproximadamente 30-35 minutos.
Ya sabéis como comprobar si está cocida, pincharla con un palillo y comprobar que se ha cuajado y al final (si lo necesita) sólo queda gratinar un poco para que coga color tostado.
Para decorar, preparamos una glasa mezclando el azúcar glas con unas gotas de jugo de limón, y cuando obtengamos una mezcla homogénea la utilizamos para decorar la tarta una vez fría. Podemos añadir una pequeña decoración de piel de limón.