Desde que descubrí el Hojaldre, me he convertido en una adicta a él, se pueden preparar tanto platos salados, como postres espléndidos, super fáciles de preparar y muy resultones.
Hoy os enseñaré a preparar unas caracolas de canela, que se preparan en un plis-plas y sorprenden a tus invitados. Empezamos…
Ingredientes: (9-10 unidades)
1 lámina de hojaldre fresco
Azúcar moreno
Canela en polvo
Mantequilla (pomada)
Huevo batido
Preparación:
Extendemos la lámina de hojaldre y le pasamos el rodillo suavemente.
Con un cuchillo cortamos la lámina en dos partes iguales.
Preparamos el relleno de las caracolas, mezclando la mantequilla pomada, con el azúcar moreno y la canela.
Ahora extendemos muy bien la preparación en una de las mitades de la lámina del hojaldre, vigilando que no haya mucho relleno para que no se esparza cuando preparemos las caracolas.
Tapamos el relleno con la otra mitad del hojaldre y presionamos ligeramente para que queden bien unidas. Y pasamos dicha lámina a la nevera durante 15 minutos, así podremos trabajar mejor para cortar las caracolas con el hojaldre frío.
Sacamos de la nevera nuestro hojaldre relleno, y empezamos a preparar las caracolas, cortamos tiras a lo ancho de aprox. 1,5 cm, lo retorcemos sobre sí mismo y luego lo enrollamos en forma de espiral.
Vamos colocando las caracolas sobre la placa del horno, sobre la que hemos colocado una hoja de papel de horno.
Las pintamos con el huevo batido, y las espolvoreamos con un poco de azúcar y canela.
Ya sólo queda hornear a media altura, a 210º con calor arriba-abajo y si tienes ventilador mejor, durante unos 10-12 minutos hasta que estén doraditas. Y aquí tienes el resultado, … ya podemos merendar.
Consejos:
– Para trabajar mejor el hojaldre es mejor hacerlo en frio para moldearlo mejor.
– Estas caracolas las puedes rellenar de lo que quieras, crema de chocolate, mermelada, dulce de leche, etc.
– Sobre la temperatura del horno, consulta siempre las indicaciones del fabricanta del hojaldre que utilices, para obtener así el mejor resultado.
