Cuando descubres las utilidades de la pasta brisa no puedes parar de hacer delicias, esta vez le ha tocado a una especie de Quiche, pero con un poco adaptada a nuestros gustos. Esta tarta la he conocido a través de mi blog favorito @webosfritos.
Te puede servir para una merienda, para una cena, y tiene la ventaja de tenerla preparada con antelación y así estar disponible para tus invitados.
Ingredientes:
1 lámina de masa quebrada o hojaldre
1 bote de leche Ideal 400gr.
2 huevos
1 pizca de sal
1 pizca de pimienta
75 gr de mozarella
100 gr. queso tipo philadelphia
1 calabacín mediano
un poco de bacon picadito
Preparación:
Vamos a preparar la base de la tarta. Extendemos la lámina de pasta en un molde previamente engrasado, no estiramos, pinchamos con un tenedor todo el fondo de la tarta. Recortamos un papel de hornear y lo colocamos en el fondo, y lo ponemos en el congelador durante 10 minutos.
Precalentamos el horno a 200º.
Vamos a preparar el relleno, batiendo los huevos con sal y pimienta, añadimos la leche ideal y batimos de nuevo. Cortamos la mozarella cuadraditos pequeños y mezclamos con la mezcla anterior. Por último añadimos el queso tipo philadelphia y batimos con unas barillas, hasta que esté todo bien integrado.
Sacamos del congelador la masa y cubrimos el papel de hornear con garbanzos secos, que nos ayudaran a que no se suba la masa.
Cocemos durante 12 minutos aproximadamente.Transcurrido el tiempo retiramos del horno y bajamos la temperatura a 180º. Retiramos los garbanzos cuidadosamente para no quemarnos y rellenamos con el relleno previamente preparado, teniendo en cuenta de que no llegue al borde.
Al final ponemos el calabacín y los taquitos de bacon e introducimos en el horno, cocción arriba y abajo durante 15-20 minutos aproximadamente, hasta que el relleno haya cuajado pero quede ligeramente cremoso.
Y ya tenemos una excelente opción para una cena informal de verano, lista para disfrutar.
